Debido a su situación precaria, algunas personas ven sus sueños como imposibles de realizar. Sin embargo, con paciencia y perseverancia, sus objetivos pueden alcanzarse.
Este fue el caso de Elsa Campodónico, quien emprendió un largo camino para realizar su sueño. Esta mexicana cosechó los frutos de su arduo trabajo al convertirse en piloto de aerolínea.
Cuando naces en una familia pobre, no recibes ningún trato especial. Esto fue cierto para Elsa, quien tuvo que trabajar desde muy joven para ayudar a sus padres, cubrir sus necesidades y financiar sus estudios.
La joven vendía maíz, empaquetaba productos en un supermercado y realizaba muchos otros trabajos pequeños, según Refletir para refletir, el 18 de abril de 2023.
Orgullosa de ganarse la vida con dignidad y honor, esta mexicana enfrentó muchas dificultades y obstáculos para mejorar su situación financiera. Luego completó sus estudios y obtuvo su título en ingeniería civil.
Pero la historia no termina ahí, ya que la joven tenía muchos otros planes en mente. De hecho, consiguió un puesto en una aerolínea como azafata y visitó varios países y continentes.
Pero esto no fue suficiente para Elsa, quien era muy ambiciosa y deseaba más que nada cumplir su sueño de convertirse en piloto de aerolínea.
Esta profesión, a menudo dominada por hombres, la fascinó mucho, y fue un gran desafío para ella poder acceder a ella. Para realizar su sueño, tuvo que dejar su trabajo como azafata para continuar sus estudios.
En la Escuela de Aviación Comercial del Estado de México, ella fue una de las tres mujeres entre una multitud de hombres que se preparaban para volar.