Como Heidi Powell es muy conocida en la industria del fitness, pudo conocer por su cuenta el viaje de Jacqueline para perder 170 kg.
Heidi decidió contarnos esta historia en su blog porque quedó muy impresionada. Su objetivo era demostrarnos que, con suficiente determinación, todo se puede lograr.
Jacqueline Adán luchó contra la obesidad toda su vida, lo que le hacía sentir vergüenza de salir de casa o realizar determinadas actividades. Comía más cuanto más agitada se sentía.
Con el tiempo, probó una variedad de dietas, pero ninguna resultó útil. La comida era la preocupación constante de Jacqueline y estaba constantemente a dieta. Tomó la decisión de dejar sus hábitos alimenticios y esforzarse por vivir una vida similar a la de las personas que la rodeaban cuando asistía a la universidad.
Su hermana Jenny y su novio Kevin querían visitar Disneylandia algún día. Aunque Jacqueline adoraba Disneylandia y estaba ansiosa por visitarlo, la experiencia real no cumplió sus expectativas.
Estaba tan débil que tuvo que alquilar una silla de ruedas para caminar la corta distancia hasta la puerta principal. Su peso había hecho que a Jacqueline le resultara casi imposible caminar.
Se sentía avergonzada por la forma en que la gente la veía y parecía juzgarla porque tiene tanto sobrepeso que no puede caminar sola. Usó una silla de ruedas para viajar a Disneylandia.
¡Jacqueline estaba avergonzada! Además, su peso le impedía realizar actividades en el parque.
Después de abandonar el parque, se sintió abrumada por emociones que incluían incredulidad, humillación, vergüenza y furia. Estaba asombrada de haberse dejado involucrar en esta situación.
Nada podrá revertir la determinación de Jacqueline de hacer un cambio en su vida después de cumplir 25 años en febrero de 2021. Llamar a Jenny Craig fue su elección. Aunque estaba segura de que podía lograr este objetivo, descubrió allí que necesitaba perder 300 libras.
Se sintió abrumada al salir de la oficina, pero no iba a renunciar a sus objetivos.
Pudo bajar 100 libras durante el primer año con el apoyo y el aliento de Jenny Craig. También viajó con sus amigos y familiares.
Ya había cruzado la mitad del camino en agosto de 2013. Después de eso, regresó a Disneylandia con Jenny, Kevin y sus primos. Como esta vez Jacqueline cabía en cada viaje, la experiencia fue completamente diferente. Esto aumentó su seguridad en sí misma y su determinación para alcanzar sus objetivos y nunca dejó que su peso le impidiera apreciar plenamente la vida.
Antes de Navidad, Jacqueline hizo un viaje más a Disneylandia, tras lo cual Kevin le propuso matrimonio. Disneylandia se había convertido en el lugar donde los sueños se hacían realidad y ella estaba más feliz que nunca.
Su vida había cambiado desde unos años antes. Ya había perdido cien kilos y estaba comprometida. Cuando Jacqueline alcanzó su peso ideal, tomó la decisión de casarse. Pero a principios de 2014, Jacqueline sintió que no estaba perdiendo peso como quería y que apenas podía comer. A pesar de esto, hizo un esfuerzo por convencerse de que comer no resulta automáticamente en un aumento de peso. Afortunadamente, pudo encontrar el camino correcto bastante rápido.
Comenzó a hacer ejercicio en “Fit For Life Solutions” en 2015 y los entrenadores le resultaron muy útiles.
Jacqueline vio que, como resultado del ejercicio, además de la báscula, los centímetros también se hacían más pequeños. ¡Por fin empezó a notar una clara definición muscular!
Jacqueline sigue comiendo las comidas de Jenny Craig y asiste a entrenamiento cuatro o cinco veces por semana. Incluso si el peso en la báscula no ha cambiado en seis meses, se han producido mejoras corporales notables.
Aunque está contenta de haber podido reducir su peso, actualmente le resulta difícil lidiar con el exceso de piel que quedó después de este procedimiento. Ella está intentando que su compañía de seguros le reembolse la cirugía que eliminó el exceso de piel, pero la clasifican como cosmética.
Después de someterse a su procedimiento inicial de eliminación de piel, Jacqueline ha hecho un esfuerzo por reducir sus niveles de estrés y concentrarse en su recuperación. Sin duda, encontrará una solución a sus problemas en el futuro.
Aunque su aventura está lejos de estar completa, Jacqueline está ansiosa por descubrir lo que le espera. Se siente aliviada de poder disfrutar de su vida y ya no se avergüenza de quién es.
Ya no le preocupa que su peso le impida participar en actividades con su familia o amigos o que tenga que utilizar una silla de ruedas para desplazarse.