Tatiana Santiago nunca se consideró delgada, pero durante mucho tiempo su peso se mantuvo dentro de la norma.
En 2020, su vida cambió. La pérdida de su hijo fue un verdadero shock para ella y comenzó a comer para aliviar el dolor.
A finales de año, el peso de Tatiana superó los 200 kilos y se encontró atrapada en un círculo vicioso: estrés, atracones y apatía.
Ella no se había dado cuenta de lo mucho que este estilo de vida se había apoderado de ella hasta el día en que se miró al espejo y no se reconoció. Fue entonces cuando decidió cambiar.
El primer paso fue la actividad física. Empezó con largos paseos y luego se unió a la piscina. Poco a poco, aprendió a amar el movimiento y su cuerpo respondió positivamente a sus nuevos hábitos.
El segundo paso fue eliminar los alimentos poco saludables, aunque los disfrutáramos. Eliminó de su dieta los alimentos procesados y los alimentos con alto contenido de carbohidratos.
Los resultados no se hicieron esperar. Para enero de 2023, Tatiana había perdido casi 100 kilos. Pero pronto apareció un nuevo problema: los médicos le diagnosticaron hígado graso.
Esto fue una llamada de atención para ella. A pesar de sus éxitos, su cuerpo necesitaba una intervención radical. Tatiana aceptó hacerse una cirugía de bypass gástrico.
Después de la operación, continuó con su estilo de vida saludable. Ahora entrena seis veces por semana.
Cuando regresó a casa después de todas estas transformaciones, su familia ni siquiera la reconoció al principio.
Hoy Tatiana Santiago pesa 75 kilos. Ahora se mira orgullosa en el espejo y finalmente ha aprendido a amarse.